Al conocer el
contenido de la denominada carta
a la Ministra publicada ayer, 8 de mayo, por las asociaciones de
Letrados y Letradas de la Administración de Justicia, el Comité de huelga
MANIFIESTA:
La ola de
indignación y enfado entre el personal de Justicia y el estupor y perplejidad
que hemos detectado en la ciudadanía que ha podido leer ese comunicado es una
realidad inapelable.
Desde el Comité
de huelga lamentamos el contenido del comunicado publicado por tres
asociaciones de Letrados de la Administración de Justicia el pasado lunes.
Queremos pensar
que ese comunicado, redactado desde la soberbia por las asociaciones, no
representa a la totalidad de los Letrados/as de la Administración de Justicia
ni tampoco puede representar a ese Cuerpo superior jurídico que es algo más
serio de lo que se deduce del contenido de esa carta.
Con ese
comunicado, las tres asociaciones de Letrados/as de la Administración de
Justicia, demuestran su escaso interés por el servicio público y su obsesión, por
compararse con todo el mundo a su alrededor sin valorar lo que son ni mucho
menos entender las relaciones laborales modernas.
Las
asociaciones de LAJ muestran su lado más oscuro en una carta en la que,
abiertamente, solicitan al Gobierno que no ceda ante las reclamaciones justas,
aunque ellos no lo crean así, del resto del personal de justicia incluidos los
Jueces y Fiscales.
Tras el
reconocimiento de más de 650 euros al mes en menos de año y medio, amenazan al
Gobierno con una nueva huelga si se produce una mejora salarial en el resto de
Cuerpos.
Pero lo peor de
esa carta es el descrédito profesional como servidores públicos, tanto dentro
de la oficina judicial como ante la sociedad, en el que sumen a los compañeros
y compañeras Letrados y Letradas de la Administración de Justicia.
Un descrédito
que ya se ganaron a pulso con su actitud durante “su huelga” obligando a la
suspensión de celebración de juicios sin respaldo legal (véase el propio
informe de la Abogacía del Estado al respecto), con el trato despectivo hacia
el resto de personal de las oficinas judiciales, mandándoles a “ordenar
armarios” y presionando para que no se trabajara ni siquiera en borrador.
Hoy, los
Letrados de la Administración de Justicia, los llamados a ser la nueva
centralidad de la Justicia, el eje transversal de la nueva oficina y antes
denominados la piedra angular, espoleados por este tipo de expresiones
grandilocuentes y fuera de la realidad que les regala el propio Gobierno desde
hace años y en el acuerdo de 28 de marzo, dan un “ejemplo de liderazgo” al
menospreciar, como lo hicieron con el desafortunado tweet en el que afirmaban
hacer el 90% del trabajo de la oficina judicial, al resto del personal de
Justicia.
Esa carta les
inhabilita para liderar nada porque no se puede liderar desde el desprecio, la
envidia y la soberbia.
Recordamos que
con la acción sindical de las organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial
siempre ha sido beneficiario también el cuerpo de LAJ (recuperación de los tres
días de permiso, inclusión en la LOPJ del derecho a la carrera profesional,
obligación introducida en la LOPJ para la mejora del complemento específico,
etc.), incluso con movilizaciones y huelgas en las que nunca han participado
(más bien han dificultado) los trabajadores y trabajadoras del resto de cuerpos
generales y especiales hemos conseguido defender también sus derechos
laborales, impidiendo, por ejemplo que el centro de destino fuese la totalidad
de plazas del municipio (huelga de noviembre de 2018) o subida del complemento
específico (manifestación en Madrid y acuerdo de diciembre de 2021).
Mientras, estas
asociaciones de LAJ, corporativas e insolidarias, se han empeñado en dificultar
los derechos del resto de personal, posicionándose y actuando en contra de la
promoción interna desde el cuerpo de Gestión y oponiéndose a que la sustitución
de Gestión a LAJ sea el mecanismo ordinario de cobertura de vacantes o
ausencias, asuntos en los que hasta ahora han tenido el inapreciable apoyo del
Ministerio de Justicia, tan clasista o más que las propias asociaciones.
Asimismo,
siguen defendiendo estas asociaciones, sin pudor alguno, que la productividad
derivada del trabajo que hacemos todos los cuerpos solo la cobren los y las
LAJ, la imposición de turnos de sustitución sin retribución en el cuerpo de
Auxilio mientras defienden solo para LAJ la retribución de estas sustituciones
o la falta de solicitud de algunos/as LAJ del nombramiento de personal interino
cuando ese es su interés personal que nada tiene que ver con la mejora del
servicio público.
El ejercicio de
una actividad representativa y de un cargo en una organización sea un sindicato
o una asociación exige responsabilidad, algo de humildad, vocación de servicio
y sentido común, algo de lo que, a la vista de la carta, al menos los
redactores de esa carta carecen en claro perjuicio para los intereses
profesionales de los compañeros y compañeras de este Cuerpo de la
Administración de Justicia, de los del resto de cuerpos y del propio servicio
público.