En esta entrada os dejamos copia del
correo remitido ayer por la tarde al Secretario General de Innovación, el
Ministerio de Justicia debe tomar medidas mucho más restrictivas y disminuir el
personal presencial de forma urgente.
Este Ministro de Justicia está actuando
con medidas insuficientes y tardías. Los funcionarios de la administración de
justicia estamos desprotegidos y con ello estamos colaborando a la
transmisión del virus, que es lo que se debe evitar a toda costa.
Buenos tardes, en vista del crecimiento de
la expansión del COVID-19, no podemos esperar al viernes y nos vemos obligados
a exigir que con carácter urgente se dicten nuevos servicios esenciales,
respetando el servicio público, pero teniendo en cuenta las directrices del
estado de Alarma.
Hemos vivido situaciones inaceptables ayer
lunes, como ya le trasladamos, en varios juzgados y tribunales. No dudamos que
no se va a repetir por lo que es imprescindible y urgente mejorar la gestión.
El único fin es preservar la salud de los
funcionarios y de los ciudadanos, estamos convencidos de que se puede atender
perfectamente el servicio de la justicia, reduciendo el personal presencial en
las sedes judiciales y cumpliendo con las normas del estado de Alarma.
Tras la aprobación del RD de Estado de
Alarma, por el que se reducen las actuaciones judiciales a la mínima expresión
(servicios de guardia, actuaciones urgentes de Registro Civil y algunas más
relativas a la protección de derechos fundamentales), con suspensión de los
plazos procesales, desde STAJ tenemos que insistir en la
reducción de los servicios esenciales presenciales, declarados por la
resolución del Secretario de Estado
Por lo que respecta a las actuaciones que
no constituyen el servicio de guardia, en la mayoría de los casos no
requieren la presencia física efectiva y permanente de ningún funcionario
durante la jornada laboral, sin perjuicio de que deban ser atendidas para
lo cual es suficiente que los funcionarios estén en situación de continua localización
y disponibilidad.
Ello sin perjuicio de que en los edificios
judiciales deba permanecer un personal mínimo precisamente para la recepción de
las denuncias o comunicaciones que den lugar a esas actuaciones. De hecho, para
el cuerpo de Letrados Judiciales así lo ha considerado el Ministerio,
destinando a ello un número muy reducido de efectivos (uno por cada cinco, ocho
o diez juzgados, según los tipos de órganos, con la salvedad de los Juzgados Únicos en los que al menos en
Asturias, están todos designados como servicios esenciales ), a los que además les
permite el “teletrabajo”. Nos parece positivo reducir la presencia en las sedes
judiciales de LAJ y también debe reducirse de los funcionarios de cuerpos
especiales y generales.
Por que respecta a los funcionarios
de los cuerpos generales de la Administración de Justicia, el número
de efectivos que ha determinado el Ministerio que atienda los servicios, de
forma presencial y permanente en horario de jornada laboral, es de un
funcionario por cada juzgado y en muchos dos por juzgado, con independencia de
si ese juzgado ha de realizar o no actuaciones urgentes e inaplazables. Es más,
con toda probabilidad no tendrá que realizar ninguna de estas actuaciones,
porque rara vez se dan.
Por ejemplo, carece de sentido que haya un
funcionario en cada una de las secciones de lo contencioso administrativo de la
Audiencia Nacional, o de los Tribunales Superiores de Justicia, o en cada
juzgado de primera instancia o de lo social, etc, etc. Ello provoca que cientos
de funcionarios tengan que acudir a sus puestos de trabajo, para estar allí
cruzados de brazos porque prácticamente ninguna de sus competencias está
catalogada en el RD y por el Consejo General del Poder Judicial como servicios
esenciales durante el estado de alarma.
Se está informando que 1 persona puede
contagiar a 3 o más y así se sigue la cadena y se aumenta el riesgo de
contagios, teniendo en cuenta que se desplazan en servicio público en la
mayoría de los casos, y en especial en Madrid, donde la situación es más grave.
Más allá de los servicios de guardia y los
órganos con competencias penales, para atender eventualmente actuaciones
urgentes e inaplazables de causas con preso, en el resto de órganos
judiciales sería más que suficiente con que el personal estuviese en
condiciones de continua localización y disponibilidad, por si fuese
necesario acudir a realizar alguna actuación urgente e inaplazable, bastante
poco probable.
Sin embargo, con la medida, edificios que
podrían estar atendidos por poco más de una decena de funcionarios, tendrán más
de 30 o 50, o incluso más funcionarios. Claro ejemplo para utilizar de base es
el T.S que ha reducido al mínimo su personal.
A ello se une que en los centros
de trabajo las medidas de prevención son INEXISTENTES y los equipos de
protección individual los tienen que buscar los funcionarios por su
cuenta, a lo que se une una limpieza poco adecuada, en muchos
edificios judiciales.
No vamos a entrar que esta orden ha sido
dictada unilateralmente y ni siquiera comunicada por si podíamos aportar
mejoras a la misma, ya que lo importante es mejorarla, para parar esta
expansión del virus.
Esperemos que el compromiso dado por el
Secretario General de dialogo y coordinación con los sindicatos que
representamos al colectivo mas grande de justicia se cumpla sin duda, y lo
esperamos en beneficio de todos para estar unidos el objetivo único de luchar y
terminar con el covid-19.
Es paradójico que por una parte el
Gobierno y sanidad de todas las formas posibles, nos diga que nos quedemos en
casa, pero por otro lado, el mismo gobierno, en este caso el Ministro de
Justicia exponga a los funcionarios judiciales a un riesgo de contagio inútil
que trasciende al resto de ciudadanos al desplazarnos y convivir con terceros.
Esperamos que tomen en consideración
nuestra petición estamos obligados a evitar contagios tal y como nos exige
el Gobierno de la Nación y todo el colectivo de Sanidad.
Todos tenemos la obligación de no propagar
el virus y el Ministro de Justicia tiene la obligación de agilizar las medidas
y recortes de personal presencial en Justicia.
Reiteramos nuestra colaboración en
cualquier momento, un saludo.