Previamente a visitar el
edificio, hemos destacado situaciones que impiden el buen funcionamiento de la
mayoría de los Juzgados de Instrucción y también de los de Primera Instancia,
como son las de los “Juzgados-pasillo” por los que los usuarios deben deambular
para llegar a otros Juzgados, que ha su vez son pasillo para acceder al resto
del primer Juzgado; la falta de espacio para colocar estanterías para tener los
procedimientos vivos, en trámite, cercanos al funcionario; cables por los
suelos; oficinas y despachos sin ventanas y sin luz natural; la difícil
accesibilidad para funcionarios y usuarios entre los edificios dónde deben
dirigirse para la mayoría de actuaciones, presentación de escritos, notificaciones
y Juzgado de Guardia; la falta de efectivos de seguridad y los problemas de
falta de cobertura en sus telecomunicaciones; la mala e insuficiente señalética
así como los complicados rodeos que hay que superar para acceder a los
distintos servicios; y el contraste que existe entre los grandes espacios,
reservados para aulas, servicios múltiples, salones de reuniones, etc, que en
general son de uso esporádico, y las oficinas de los Juzgados de Primera
instancia, así como los de Instrucción, en los que se encuentran los
funcionarios prácticamente hacinados.
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